DMT (dimetiltriptamina) es un psicodélico que se encuentra naturalmente en algunas plantas y animales. En los últimos años, ha habido un creciente interés en el uso de DMT como una terapia complementaria para tratar trastornos neurológicos como la epilepsia del lóbulo temporal. Este tipo de epilepsia se caracteriza por convulsiones que se originan en el lóbulo temporal del cerebro, lo que puede provocar síntomas como alteraciones en el estado de ánimo, la memoria y la percepción sensorial.
Un estudio publicado en la revista Frontiers in Neuroscience en 2020 investigó los efectos de DMT en la plasticidad neuronal en la epilepsia del lóbulo temporal. La plasticidad neuronal se refiere a la capacidad del cerebro para adaptarse y cambiar en respuesta a la experiencia. En este estudio, los investigadores utilizaron imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI) para medir la actividad cerebral de pacientes con epilepsia del lóbulo temporal antes y después de recibir DMT.
Los resultados mostraron que la administración de DMT aumentó la conectividad funcional entre el lóbulo temporal y otras áreas del cerebro, incluyendo la corteza prefrontal. Además, los pacientes informaron de una reducción en la frecuencia y gravedad de las convulsiones después de recibir DMT. Los investigadores sugieren que estos efectos podrían estar relacionados con la capacidad de DMT para mejorar la plasticidad neuronal en el cerebro.
Aunque estos hallazgos son prometedores, es importante tener en cuenta que este estudio fue pequeño y no controlado con placebo. Se necesitan más investigaciones para confirmar estos resultados y determinar la eficacia y seguridad de DMT como terapia complementaria para la epilepsia del lóbulo temporal.
En otro estudio publicado en la revista Epilepsy & Behavior en 2021, los investigadores analizaron los efectos de la administración de DMT en pacientes con epilepsia del lóbulo temporal refractaria a los tratamientos convencionales. Los pacientes recibieron una dosis de DMT y se les realizaron evaluaciones de seguimiento en los días y semanas posteriores.
Los resultados indicaron que la administración de DMT no tuvo un efecto significativo en la frecuencia o gravedad de las convulsiones en estos pacientes. Sin embargo, los pacientes informaron de una mejora en su estado de ánimo y bienestar general después de recibir DMT. Los investigadores concluyen que DMT podría ser beneficioso como terapia complementaria para mejorar la calidad de vida de los pacientes con epilepsia del lóbulo temporal, aunque se necesitan más estudios para confirmar estos hallazgos.
En general, aunque la investigación sobre los efectos de DMT en la epilepsia del lóbulo temporal es limitada, los resultados preliminares son prometedores. Se necesitan más investigaciones para determinar la eficacia y seguridad de DMT como terapia complementaria para la epilepsia del lóbulo temporal, así como para comprender mejor los mecanismos subyacentes de su acción en el cerebro. Si se demuestra que es seguro y eficaz, DMT podría ser una opción terapéutica importante para las personas que sufren de esta forma de epilepsia y que no han respondido a los tratamientos convencionales.