La jurema y su papel en la cultura brasileña .

 

Brasil es un país rico y diverso en su cultura, historia y religión. Entre las expresiones religiosas que se han desarrollado en su territorio, se destacan las llamadas religiones afrobrasileñas, que son el resultado del sincretismo entre las tradiciones africanas, indígenas, europeas y orientales. Estas religiones tienen en común la creencia en la existencia de espíritus que pueden comunicarse con los humanos a través de la mediunidad y que pueden ayudarlos en sus problemas materiales y espirituales.

En este artículo, vamos a conocer algunas de estas religiones afrobrasileñas, como la jurema, el catimbó, la umbanda y el candomblé de caboclo. Vamos a ver sus orígenes, sus creencias, sus rituales y sus características principales. Vamos a descubrir la riqueza y la belleza de estas manifestaciones religiosas que reflejan la identidad y la diversidad del pueblo brasileño.


La jurema es una planta sagrada que forma parte de la cultura brasileña desde tiempos precolombinos. Su nombre científico es Mimosa tenuiflora o Mimosa hostilis, y pertenece a la familia de las leguminosas. Su raíz contiene una sustancia psicoactiva llamada dimetiltriptamina (DMT), que produce efectos alucinógenos cuando se ingiere junto con un inhibidor de la monoaminooxidasa (IMAO), como el mariri o la chacruna.

La jurema se utiliza para elaborar una bebida ritual conocida como vinho da jurema o simplemente jurema, que se consume en ceremonias religiosas de diversas tradiciones, como el catimbó, la umbanda y el candomblé de caboclo. Estas tradiciones son el resultado de la mezcla de elementos indígenas, africanos y europeos, y reflejan la diversidad y la riqueza del campo religioso brasileño.

La bebida de jurema se considera sagrada porque permite entrar en contacto con los espíritus de la naturaleza, los ancestros y las divinidades. También se le atribuyen propiedades curativas, afrodisíacas y mágicas. La jurema es una planta maestra que enseña, guía y protege a sus devotos.

La historia de la jurema está marcada por la resistencia y la persecución. Durante la colonización portuguesa, los indígenas que practicaban el culto de jurema fueron reprimidos por los misioneros católicos, que consideraban la bebida como una obra del diablo. Muchos indios y caboclos fueron presos acusados de practicar hechicería o "adjunto da jurema". Sin embargo, el culto de jurema logró sobrevivir y adaptarse a los cambios sociales y culturales, incorporando elementos de otras religiones y creando nuevas formas de expresión.

Hoy en día, la jurema sigue siendo una planta venerada por muchos brasileños que buscan en ella una fuente de sabiduría, sanación y conexión espiritual. La jurema es un símbolo de la identidad y la diversidad cultural de Brasil, así como de su riqueza natural y ecológica.

El Catimbó
El catimbó es una expresión religiosa que se originó en el nordeste de Brasil, a partir del contacto entre las espiritualidades indígena, europea y africana. Su nombre proviene de las lenguas tupi-guaraníes y significa “fumaça de mato” o "vapor de erva". El catimbó se basa en el uso ritual de la jurema, una planta sagrada que contiene DMT, una sustancia psicoactiva que produce visiones y estados alterados de conciencia.

El catimbó se practica en sesiones llamadas giras, donde los fieles se reúnen para recibir las orientaciones y los favores de los mestres, que son espíritus de personas fallecidas que se manifiestan a través de los catimbozeiros, que son los médiums o sacerdotes del culto. Los mestres pueden ser de diversas categorías, como indios, caboclos, negros, ciganos, marineros, médicos, etc. Cada mestre tiene su propia historia, personalidad, especialidad y forma de trabajar.

El catimbó es una religión sincrética, que incorpora elementos de otras tradiciones, como el catolicismo, el espiritismo, la umbanda y el candomblé. En el catimbó se veneran santos católicos, orixás africanos y entidades como exus y pombagiras. El catimbó también utiliza objetos litúrgicos como velas, crucifijos, imágenes, agua bendita, etc. Además, el catimbó tiene una fuerte dimensión mágica, ya que realiza trabajhos o trabajos para diversos fines, como el amor, la salud, el dinero, la protección, etc. Para ello se emplean hierbas, polvos, perfumes, amuletos y otros elementos.

El catimbó es una religión diversa y plural, que presenta diferentes modalidades o familias según la región, la influencia y la tradición. Algunas de estas modalidades son el catimbó-jurema, el catimbó-de-terreiro, el catimbó-de-mesa y el catimbó-de-caboclo. Cada una tiene sus propias características y formas de expresión. El catimbó es una religión viva y dinámica, que se adapta a los cambios sociales y culturales.

El catimbó es una religión que busca la conexión con lo sagrado a través de la naturaleza, los ancestros y los espíritus. El catimbó es una religión que enseña, cura y protege a sus seguidores. El catimbó es una religión que refleja la identidad y la diversidad cultural del pueblo brasileño.

La Umbanda
La umbanda es una religión brasileña que combina elementos de las religiones africanas, indígenas, cristianas y orientales. Su nombre proviene del kikongo, una lengua bantú de Angola, y significa "el arte de sanar". La umbanda se basa en la creencia en la existencia de espíritus que pueden comunicarse con los humanos a través de la mediunidad y que pueden ayudarlos en sus problemas materiales y espirituales.

La umbanda surgió a principios del siglo XX, a partir de una sesión espiritista en Río de Janeiro, en la que un joven médium llamado Zélio Fernandino de Moraes recibió el mensaje de un espíritu llamado Caboclo das Sete Encruzilhadas. Este espíritu anunció el nacimiento de una nueva religión que acogería a todos los espíritus sin distinción de raza, clase o credo. Así, la umbanda se presentó como una religión inclusiva, tolerante y universalista.

La umbanda se organiza en torno a siete líneas o falanges de espíritus, cada una con su propio jefe y función. Estas líneas son: Oxalá, Ogum, Xangô, Yemanjá, Oxóssi, Iansã y Omulu. Cada línea está asociada a un color, un día de la semana, un elemento natural y un santo católico. Los espíritus que integran estas líneas pueden ser de diversas categorías, como: caboclos, pretos-velhos, crianças, baianos, boiadeiros, marinheiros, exus y pombagiras. Cada espíritu tiene su propia historia, personalidad, atributos y forma de trabajar.

La umbanda se practica en lugares llamados terreiros o tendas, donde se realizan las ceremonias o giras. En estas ceremonias, los fieles se reúnen para cantar, bailar, rezar y recibir las orientaciones y los favores de los espíritus. Los espíritus se manifiestan a través de los pais o mães-de-santo, que son los líderes religiosos y los médiums del culto. Los espíritus pueden dar consultas, hacer trabajos o simplemente dar sus enseñanzas.

La umbanda es:
  • Una religión sincrética, que incorpora elementos de otras tradiciones religiosas y espirituales.
  • Respeta la diversidad y la libertad de creencias. 
  • Busca la armonía entre el ser humano, la naturaleza y lo sagrado. 
  • Es una religión que sana, enseña y protege a sus seguidores.

El Candomblé de Caboclo:
El candomblé de caboclo es una modalidad de candomblé que, además de adorar a los orixás, voduns o nkisis, también lo hace con los llamados espíritus amerindios, que también son llamados entidades, catiços o vaqueros de caboclos. El candomblé de caboclo tiene como base la lengua portuguesa, además de las ofrendas al caboclo.

El candomblé de caboclo se originó en el nordeste de Brasil, a partir del contacto entre las religiones africanas traídas por los esclavos y las tradiciones indígenas de los pueblos nativos. El caboclo es una figura que representa al mestizo de blanco e indio, que vivía en el interior del país y que tenía un conocimiento profundo de la naturaleza y sus secretos.

El candomblé de caboclo se caracteriza por la incorporación de los espíritus de los caboclos, que son considerados como guías, protectores y maestros. Los caboclos se dividen en varias categorías, según su origen, función y afinidad. Algunas de estas categorías son: caboclos da mata, caboclos das águas, caboclos do fogo, caboclos do ar, caboclos do oriente, caboclos do ocidente, caboclos do norte, caboclos do sul, caboclos da lua, caboclos do sol, etc.

El candomblé de caboclo se practica en lugares llamados terreiros o tendas, donde se realizan las ceremonias o giras. En estas ceremonias, los fieles se reúnen para cantar, bailar, rezar y recibir las orientaciones y los favores de los caboclos. Los caboclos se manifiestan a través de los pais o mães-de-santo, que son los líderes religiosos y los médiums del culto. Los caboclos pueden dar consultas, hacer trabajos o simplemente dar sus enseñanzas.

El candomblé de caboclo es una religión sincrética, que incorpora elementos de otras tradiciones religiosas y espirituales. El candomblé de caboclo respeta la diversidad y la libertad de creencias. El candomblé de caboclo busca la armonía entre el ser humano, la naturaleza y lo sagrado. El candomblé de caboclo es una religión que sana, enseña y protege a sus seguidores.

Conclusión:
En este artículo, hemos conocido algunas de las religiones afrobrasileñas que se han desarrollado en Brasil, como la jurema, el catimbó, la umbanda y el candomblé de caboclo. Hemos visto que estas religiones son el producto del sincretismo entre las tradiciones africanas, indígenas, europeas y orientales, y que tienen en común la creencia en la existencia de espíritus que pueden comunicarse con los humanos a través de la mediunidad y que pueden ayudarlos en sus problemas materiales y espirituales.

Hemos visto también que estas religiones tienen sus propios orígenes, creencias, rituales y características, y que expresan la riqueza y la diversidad de la cultura brasileña. Hemos descubierto que estas religiones son una forma de resistencia, de identidad y de armonía entre el ser humano, la naturaleza y lo sagrado.

Esperamos que este artículo haya sido de su interés y que haya contribuido a ampliar su conocimiento sobre las religiones afrobrasileñas. Estas religiones son un patrimonio cultural y espiritual de Brasil y del mundo, que merecen ser respetadas y valoradas.

Autor: Alejandro Rojas (caminante de la medicina)

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